Derechazo del matador colombiano Luis Bolívar |
Tarde desangelada la
no. 20 de este largo historial venteño Isidril del 2014, con una mixtura de
clima, poco sol, lloviendo, con vientos agresivos y tarde gris y fresca. Había expectación
por el encierro y los matadores, todo se fue por la borda.
Por Renné Moreno Vélez:
Se lidió una torada de la emblemática ganadería
de "Baltasar Ibán", madrileña, de "El Escorial", divisa
verde y rosa. De distinto comportamiento, sin romper ninguno de los astados. Bien
presentados todos -el 4o. con un perchero sobre el
testuz- manejables, desenrazados, el 5o. fuera de tipo, parecía de "los
guateles" y abantos.
Fernando Robleño (marfil y oro con cabos negros) abrió plaza "camarito" un astado fijo, pero que había que esperar mucho entre pase y pase, embestidas aisladas, lo mejor una tanda de 4 naturales con fondo y verdad, tenía cierta calidad pero terminó tardo y corto. Silencio.
Fernado Robleño tratando con el 4° |
Al 4o. de la corrida un animal muy serio por
delante, con leña exagerada y astifina, vuelto también. Lo bregó con sitio y
cabeza, el bovino sin ser un barrabás pasó bien en varas. Ángel Otero saludó
desde el tercio por 2 grandes pares. El toro cansino y obediente, no transmitió
mucho, siempre con la cabeza alta. Terminó Robleño y silencio.
Luis Bolívar (rioja y oro) el colombiano se las vio con un 2o. burel pegajoso, frenándose y con el viento calando su desempeño, firme de muñecas lo cambió de terreno y pudo darle pases sueltos y algunas tandas cortas, el toro áspero, siempre pegaba un brinco al terminar las suertes. El oficio de este Bolívar se palpó al tapar siempre la cara del castaño, citando de frente. Un aviso y silencio.
Con el 5o. llamado "mexicano" un toro más bajo y armónico de hechuras, no se acomodó y le endilgó un trasteo aseado dentro de lo posible. Silencio.
Gran derechazo del matador Bolívar ante el mejor de la tarde. |
Rubén Pinar (verde aceituna y oro) comenzó su actuación
con "arbolario", negro alto de armas, muy abanto y suelto, vamos, por
momentos su comportamiento parecía al de un toro de aquí, fue el cornúpeta que más
posibilidades dio, pero Robleño lo toreó desajustado y aliviado. Al final el
astado se aburrió, era noble pero sin conexión. Silencio.
Cerró plaza "Costurito II" un castaño entipado en el encaste "Contreras", que es el titular de los Ibanes. Salió con ímpetu y desarmó a Robleño, algún detalle y el burel desarrollo peligro sordo, tirando arreones. Lo mató de una gran estocada.
3/4 de entrada y lluvia, sol y viento. Y pensar que con un encierro más
fiero el Mto. colombiano César Rincón triunfó y nadie lo bajó de su pedestal, esto
en 1991, lo acompañó Miguel Espinosa "Armillita" y Curro Vázquez; que
diferencia de actitudes en esa corrida.
Saludos desde el tercio.
Renné Moreno Vélez.