El caballero potosino se alzó como el triunfador de la corrida, con el corte de dos apéndices. |
Por Adriana García Rojas:
Jorge Hernández:
Estuvo muy acertado en la colocación de rejones y banderillas, manejando de una manera muy lucida sus corceles y colocando debidamente el rejón de muerte, haciéndose merecedor de dos orejas, que lo acreditaron como el triunfador de la tarde.
Estuvo muy acertado en la colocación de rejones y banderillas, manejando de una manera muy lucida sus corceles y colocando debidamente el rejón de muerte, haciéndose merecedor de dos orejas, que lo acreditaron como el triunfador de la tarde.
En su segundo toro, no tuvo la misma suerte, ya que el astado no se prestó para el lucimiento, haciéndole complicada la labor de la suerte de matar, teniendo que desmontarse y matar a pie.