Por Genaro García Rojas:
Un loable festival taurino fue el que se vivió el pasado sábado, cuando jóvenes aspirantes a ser matadores de toros le brindaron un homenaje al gran picador Gabriel "Pollo" Meléndez, quien por causas de la profesión no pudo asistir.
La esposa del varilarguero fue quién recibió el reconocimiento a nombre de su marido, para darle paso a los jóvenes para lidiar erales de la ganadería de Arzola, en general bien presentados y de buen comportamiento, a excepción del último que fue incierto y parado.
Abrió el rejoneador Miguel de la Fuente, sorteando con su caballo muy toreramente, regalando destellos de mucho valor. Colocó 5 banderillas quedando traseras y caídas, además de dos rosas en buen sitio. Tomaron escena los Forcados Potosinos, realizando una pega correcta. Aplausos al final.
El primero de a pié, fue el novillero Carlos Rodríguez, quien espera tomar la alternativa en próximas fechas. Con el capote a la verónica, además de verse muy bien bregando a su toro. Bien cubierto el tercio de banderillas. En la muleta una lidia derechista de calidad, sobresaliendo además dos naturales toreros. Mal obró en el acero. Aplausos.
Vino en turno el moreliano Patricio Ochoa, quien con el capote no pudo sortear con clase, ante un novillo geniudo. Con la tela, sólo destellos pues no logró entender nunca a su enemigo, además de llevarse un par de cates. Aplausos.
Cerró el festejo el potosino Rodrigo Guevara, ante un astado sin transmisión y que terminó parándose, además de tener una condición de andarín. Par de tandas por derecha de calidad para tirarse a matar. Aplausos también.
Un festival agradable, con el homenaje como bandera, teniendo la oportunidad nuevamente los jóvenes de demostrar avances, pero sobre todo de darle la cara a los animales que tanta falta les hace, consiguiendo aprender de todo, sobre todo de los novillos difíciles como los que resultaron el sábado.