Hoy, pero hace 18
años, perdimos a un figurón del toreo, admirado por muchos, criticado por otros
y repudiado por algunos.
Por Renné Moreno:
Desde el principio de
su carrera llamó la atención poderosamente, para bien, hizo de la fiesta en México
un antes y un después de él. En España lo acusaron algunos críticos de temerle
al toro de allá, cuando triunfo al lado de sus figuras en sus terrenos, la
gente ibérica lo bautizó como "el mexicano de oro"… claro no es otro más
que Manolo Martínez.
El último mandón de la
fiesta nacional... te recordamos maestro: Manolo. Manolo y ya.