"Payo" triunfa en El Paseo.

Por Genaro García Rojas:



Lidiándose 7 astados de la ganadería de Xajay de juego desigual, y uno de Fernando de la Mora para rejones que cumplió, San Luis Potosí vivió la primer corrida del 2014 con un lleno espectacular en el coso de la Monumental Plaza de Toros El Paseo, con el rejoneador Alejandro Zendejas y la presencia de la primera figura del toreo mundial; Julián López “El Juli”, alternando con los diestros mexicanos Octavio García “Payo” y el máximo triunfador de la Plaza México; “Joselito” Adame.

El joven Zendejas se presentaba en la ciudad potosina, no fue de la manera más soñada, pero sí dejando un buen sabor de boca con su actuación. El burel recién salía abanto cuando fue a topar en tablas, quebrándose el pitón izquierdo desde la cepa.  Ante la rechifla de la gente  y conociendo que no había toro de reserva para rejones, el joven queretano dispuso a lidiarlo, apaciguando paulatinamente los silbidos, convirtiéndolos en olés y palmas. Colocó un rejón de castigo en buen sitio, al igual que las banderillas y la rosa. Tendrían participación los forcados de México, pero ante la condición del toro decidieron no salir a pegar. Alejandro provocó la embestida del astado que tuvo un buen recorrido para el caballo, regalando una importante faena de presentación. Estoconazo que hizo rodar al toro, provocando las palmas del público.


Para el matador español no fueron de buen color las cosas. Vestido en obispo y oro, el diestro lidió un toro sin condiciones, descastado y soso, que al final termino incluso rajándose. Logró arrebatarle cosas buenas, sobre todo a la verónica, pero el astado no funcionó. Una estocada trasera dio frutos, para algunas palmas. En su segundo, el español tuvo cosas más interesantes. En la capa proclamó los olés del tendido a la verónica. Con la muleta lidió por derechazos y sendos remates con el de pecho, con señoría. El astado no tenía recorrido, por lo que la faena no prosperó. Palmas al final. “El Juli” decidido a triunfar, regaló un toro, el cual resultó ser otro manso, rajón, al que no le pudo hacer nada. Silbidos.



Adame vestido en terciopelo y oro, comenzó con verónicas una faena que al final sería ovacionada por su extraordinaria hondura con el segundo de a pie de la noche. El matador hidrocálido se topó con un toro muy justo de raza, al que le pegó sendos derechazos, ligando las embestidas, rematando con el desdén y soberbio trincherazo. El toro se rajo, aquerenciándose en tablas, a lo que el diestro respondió con gran calidad toreando de pitón a pitón, arrebatando los últimos alientos del toro, con molinetes sumamente justos. Mal obro la faena con la espada. Palmas. Para el quinto de a pie, el aguascalentense, salió a por todas, toreando por chicuelinas, rematando con soberbia revolera. En la muleta se lució con el de trinchera, ligando las embestidas en un palmo de terreno por derechazos. Cambiando al natural, el toro tuvo un recorrido incierto. Con una estocada sin frutos, un descabello y la euforia de la gente, el juez le concedió una meritoria oreja.

Sería Octavio el triunfador de la noche, al cortar un apéndice en cada toro, estando con hondura, valor y mucho sentimiento, lidiando con coraje y gallardía. En su primero el “Payo”, vestido en un precioso celeste y plata, estoico lidió a un toro parado, que contrarrestó con mucho valor, jugándosela pegado a pitones, arrebatando las embestidas, tocando con fuerza la muleta. Bien por derechazos, rematando con el de pecho muy marcado. Espadazo que le daría como recompensa su primer peluda de la noche. Para con su segundo, el diestro lidiaría al mejor de la noche, un toro que se desempeñó con nobleza, bravura y una embestida muy humillada, al que terminaría cortándole una oreja. García ligó las embestidas con sendos derechazos, continuando con un cambiado de mano, para rematar con el de pecho y recoger las palmas del público. Con tandas de 5, 6 muletazos, Octavio le fue llenando el ojo a la gente, que exigió de inmediato el corte del apéndice, cuando el queretano volvió a regalar otra estupenda estocada.

Ficha:

-1 toro para rejones de Fernando de la Mora, de buen juego, y siete de Xajay para los lidiadores de a pie, con buena presencia, pero todos de juego muy desigual.

-Zendejas; opinión dividida.

-“Juli”; Silencio, silencio y silbatina.

-“Joselito”; Palmas y oreja.


-“Payo”; oreja y oreja.